Nuevo Cine Mexicano

Por: Humberto Peña Dávalos
27/4/2020
“El Nuevo Cine Mexicano”

El nuevo cine mexicano le ha dado al país lo que el fútbol jamás nos ha dado y mucho más. El cine en México no se limita a llegar a cuartos de final en un mundial, directores como Iñarritu, Cuarón y Del Toro ganando premios Oscar en repetidas ocasiones, o  Amat Escalante y Carlos Reygadas ganando el premio de “mejor director” en Cannes en años consecutivos (2012-2013) son pruebas vivas de que en los últimos años México tiene historias que contar, y muchas veces estas suenan más fuertes fuera del país.

Definitivamente el cine mexicano es un gran fenómeno que es representativo de la megadiversidad del país. Tenemos desde los clásicos de la época dorada, hasta películas de luchadores y mariachis extremadamente repetitivas y llenas de clichés. Desde obras maestras galardonadas en los festivales más prestigiosos del mundo, hasta comedias románticas de cinco pesos que caen en recursos fáciles y ridículos. El dia de hoy, en esta entrada del blog, les hablaré sobre una corriente cinematográfica que tuvo un impacto muy personal en mi vida, el Nuevo Cine Mexicano.

Entiéndase por “Nuevo Cine Mexicano” el cine producido en México a finales de los años 90 e inicio del nuevo milenio. En estos años se venía arrastrando una crisis económica muy fuerte que afectaba directamente al cine mexicano, debido a que claramente el gobierno no veía este arte como una prioridad.

El IMCINE (Instituto Mexicano de Cinematografía) fue clave para traer de nuevo el cine de calidad. Esta institución cuya entidad superior es la Secretaria de Cultura fue fundada en 1983 a consecuencia del abandono a la industria cinematográfica que mencione anteriormente, empezó a apoyar a cineastas mexicanos y a historias originales. No sería hasta finales de los años 90 que veríamos los resultados de este instituto materializados.

Empezamos a ver a directores como Alejandro González Iñarritu, Luis Estrada, Alfonso Cuarón, Alonso Ruizpalacios, Jorge Fons, Amat Escalante, Guillermo del Toro, Lila Avilés, Issa López, Julio Hernández entre muchísimos otros, que no únicamente le dieron a México reconocimiento mundial y buenas historias, también inspiraron a generaciones por venir, que esperemos nos permitan seguir teniendo cine de calidad.

Muchos de estos directores finalmente emigraron a Hollywood para producir cine estadounidense, mientras que otros menos mediáticos se quedaron y hacen sus películas en México. Este aspecto de la globalización es de vital importancia para el desarrollo de la industria en México, ya que muchas de las obras más importantes no tienen el suficiente apoyo comercial dentro del país por los hábitos de consumo o por su estilo de distribución, que se enfoca mas en festivales que en las salas disponibles a todo público.

Para terminar este artículo, me gustaría invitarlos a que sigan más de cerca a los directores mexicanos más destacados y me daré la libertad de recomendarles 3 películas de este siglo que creo que valen la pena ver y que deben ser celebradas y analizadas como verdaderas obras de arte.

Güeros de Alonso Ruizpalacios
Amores Perros de Alejandro González Iñárritu
Lake Tahoe de Fernando Eimbcke


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